La Historia de Messi en River

“Me lo llevo de Newell´s, después te cuento mejor”. Esas fueron las palabras de Jorge Messi, padre de quien hoy es el mejor futbolista del mundo, Lionel Messi.

Enrique Domínguez, descubridor del talentoso zurdo rosarino, sintió una gran pena cuando en aquella práctica matutina de las infantiles de Newell´s, el padre de Lio irrumpió en pleno entrenamiento para informar que su hijo ya no iba a seguir ligado a la institución “leprosa”.

En aquel año 2000, “La Pulga” tenía solamente once años de edad y un gran futuro como futbolista. Pero ese sueño que Lionel tuvo desde muy chico estuvo en riesgo de no cumplirse; ya que desde el cuerpo médico de la institución rosarina, le habían detectado un retraso hormonal en su crecimiento.

En ese entonces, el Club Atlético Newell´s Old Boys, atravesaba una profunda crisis financiera como institución y los directivos no pudieron hacerse cargo del costoso tratamiento que necesitaba el por entonces infante, Lionel Messi.

A partir de ese momento, clave en el futuro del zurdo como deportista, el padre de la joyita decide llevarlo a probarse a River Plate. En ese momento, el club de Núñez era presidido por el Doctor David Pintado y justamente, Francisco Vairo, era el encargado de viajar al interior con el fin de reclutar jóvenes con condiciones necesarias, para pasar a jugar en las juveniles riverplatenses.

“Un amigo me trajo a Messi, lo vi chiquitito. El padre me dijo que le gustaría que lo vea. Iba a cumplir 13 años y tenía pruebas de los de 16. Le expliqué eso pero el padre me dijo que estaba acostumbrado”,  fueron las palabras de Vairo que quedó rápidamente deslumbrado cuando vio a la pulga quitarse rivales de encima con la facilidad técnica de un pichón de crack, como lo era en ese momento el actual astro mundial.

“A los diez minutos lo llamé. Él pensó que lo iba a retar porque gambeteaba a todos, pero le dije ‘no le des la pelota a nadie y si me ves a mí en el camino, también me tenés que gambetear’. ‘Pensé que me ibas a sacar’, me dijo”, recordó el ex defensor millonario en la década del 50.

El motivo Principal, por el cual el pase no llegó a prosperar, fue que desde la subcomisión de fútbol de River, no aprobaron la incorporación de la pulga a las inferiores, porque lo vieron con una contextura física muy por debajo de las expectativas que tenían para que pase a formar parte del semillero del club de Núñez.

Sin embargo, Vairo no creyó mucho ese tema del “tamaño”. Incluso en River, jugadores como Javier Saviola, Diego Buonanotte o Erik Lamela, también pasaron por una etapa compleja en su crecimiento físico y el club, aún así, supo formarlos como grandes personas y futbolistas profesionales.

Luego de la respuesta negativa de River, apareció en escena Carles Rexach, DT del Barcelona entre el 2001 y 2002, quien justamente no le importó asumir el riesgo de llevarse al astro y de convencer a la dirigencia catalana en desembolsar  los 465 mil pesos mensuales (900 dólares), para que el joven mediocampista ofensivo juegue en uno de los clubes mas importantes del viejo continente.

Los años pasaron, y muchos de los hinchas de River nunca supieron realmente el contexto en el que sucedió el episodio con el mejor jugador del mundo. Pero lo cierto es que, si nunca hubiera surgido un "pero" en esa negociación, la realidad hubiese sido otra y en la hora de repasar nombres de grandes frutos de la cantera millonaria, el nombre de Lionel Messi podría haber figurado en una posible lista.